Todo elemento en escena se convierte en símbolo. Siempre me ha gustado ayudar a otra gente a contar historias y el vestuario es una pieza clave en esos procesos: descubrir quiénes son esos cuerpos (qué esconden, qué les mueve...) y presentar sus evidencias y sus contradicciones a través de texturas, formas y colores. Analizar o crear personajes para luego dar una visión poética más profunda es algo que siempre me ha apasionado y para lo que me estoy continuamente formando.